El sr de la casa Yatay

#PoemasRoxanaBogacz

El Sr de la calle Yatay.
Era un anciano hermoso, sus ojos traslúcidos eran bellisimos y miraban directo a los míos .
Un día me fuí enojada de su casa. Tocaba y tocaba el timbre y no me atendía.
La radio estaba encendida y no me atendía.
Para mi , en aquel entonces,  era muy importante completar la cobranza de una zona, para no tener que volver por uno o dos socios, otro día.
Me fui bastante indignada. Podría decirme hoy no te puedo atender, pero ni una palabra?
A la vez siguiente, me enteré un poco mas de su vida .
Sabes , me dijo Wolf, soy sobreviviente del Holocausto, pero fue otra cosa lo que me volvió desconfiado.
Fue por una mujer.
Ah, por las dudas, si llegas y esta prendida la radio, es que no estoy, sólo  la prendo cuando salgo, ya ves, me volví desconfiado.
Mi indignación se transformó en vergüenza.
Que fácil es juzgar a alguien.
El sr se llamaba Wolf.
Me contó que se enamoró por segunda vez con mucha culpa,   Helga su primer mujer había muerto de tristeza, poco tiempo después de llegar a la Argentina. Nunca se repuso de lo que vió y vivió.
Con que derecho el se permitía  disfrutar de la vida y del amor?
Un día se encontró con la hermana de Helga y le abrió su corazón. Que tenía que hacer?
Ella le animó a seguir avanzando a pleno.
Qué hubiera querido para Helga si el que se iba primero era él?
Sé feliz, en homenaje a Helga.
Wolf se decidió. No recuerdo si se casó o solo convivió, solo se que intentó lo mejor.
A los pocos meses cuando regresó de jugar al dominó se encontró con que faltaban las alhajas y otras cosas,  valiosas solo por haber pertenecido a su Helga.
No hizo la denuncia.
Dónde se denuncia el robo de la confianza y la ilusión?
 En homenaje a aquellos que compartieron conmigo sus historias.
La historia es real, los datos ficticios