Los vuelos

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#PoemasRoxanaBogacz
Los vuelos

Sentada esta tarde en una mesa de café, intentando escribir mis páginas me distraigo al escuchar la charla de una mesa aledaña.
Están hablando de un grupo de autoayuda. La conversación capta absoluta e, intensamente mi atención, pero disimulo, intento no ser descubierta, no quisiera que se detengan al sentirse invadidos

Quisiera acotar, recomendar algún artículo, libro.
Son dos muchachos de alrededor de cuarenta años. De uno, solo veo algo de su rostro, pero sobre todo la nuca, del otro, cuando giro la cabeza puedo ver que tiene el cielo en sus ojos tan tan celestes.
Hablan y dan nombres, pero no me interesa registrarlos, merecen mi respeto, mucho respeto, porque la temática es tan fuerte, que sería una afrenta intentar oirlos.
Hablan de los vuelos de la muerte, de cargos del ejército , de la necesidad de algunos de cambiar sus apellidos, su identidad….de los HIJOS,  de los otros hijos,  los de los represores, y desfilan  imágenes que se suceden vertiginosamente. Frases, nombres, en contrapunto al mareo, mi corazón compite en protagonismo, late fuerte.
Quiero hablarles y me freno.
Alrededor veo carteles de luces de colores que se encienden y se apagan , pero es mi emoción , mi imaginación.
Los carteles tienen escritos los nombres de otros jóvenes de cuarenta, adoptados que conozco . Ni uno ni dos, varios y de sus amorosos padres.
El nombre de la abuela de la calle Sarmiento que rescató a su nieto de la escuela de mecánica de la armada pero tiene dos hijas y un yerno desaparecido. Me presenta a ese nieto y me dice-no quiere ir a las reuniones de HIJOS, lo dice con resignación.
Las imágenes en los noticieros de nietos recuperados, unos contentos y otros que se sienten ultrajados.
Y también en un cartel un poco más allá el nombre de mi amiga, que se enteró en una discusión brutal con su marido, que no era legítima si no adoptada de forma ilegal y luego su búsqueda incansable, de su origen, de sus padres biológicos.
Y todo comienza a girar, todo da vuelta y siento que de una manera u otra, por acción o por omisión uno se siente cómplice o responsable, insensible o cualquier otra cosa menos indiferente, porque nadie que haya vivido en esos años de represión a quedado indemne.
Alguien me toca el hombro, me despierta, dice que tengo pesadillas. Pregunto qué año es?
Y compruebo que cuarenta años después hay cosas que  siguen en nuestro ADN, aun en los que sólo fuimos afectados por respirar el mismo aire enrarecido.
#PoemasRoxanaBogacz

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